Tras un seguimiento personal en
el 2018, a la fecha (mayo) coligo que el 70% se dice católico, de ellos, el 60%
no pisa "casi nunca" la iglesia y si lo hace es en ceremonias
sociales de allegados como bodas, bautizos, difuntos...
El 14% lo hace "varias veces al año"; el 10% "alguna vez al
mes"; el 13% "casi todos los domingos y festivos" y el 3%
"varias veces a la semana". Preguntando en el centro de trabajo y
entorno social, el 77% cree en Dios frente al 23% que no (el 16% se define como
agnóstico y el 9% como ateo). Es decir, el pueblo en general sigue siendo
religioso pero la vivencia, no. ¿Por qué? Vemos: dos causas principales en
estos resultados: el materialismo consumista reinante que se manifiesta en una
pavorosa indiferencia, el hedonismo debido al consumismo y vida descartable; y
la imagen deteriorada de la Iglesia católica como institución (crisis de
valores). Este modelo amoral, neoliberal y relativista nos arrastra hacia la
indiferencia solidaria dificultando la verdadera experiencia religiosa y el
compromiso con el prójimo. No tenemos ejemplos a seguir en las virtudes. La
segunda causa es un problema que el Papa Francisco repite sobre las carreras
eclesiásticas a la que se someten quienes ingresan a la vida consagrada o
seminarios sin vocación, los dogmatismos curiales y la falta de ejemplo que
facilita el escándalo (homosexualidad, doble vida, pedofilia, vida gamonal). Por
eso, el mal ejemplo y el neoliberalismo, ocasiona que los templos se vacían de
fieles y generaciones enteras ignoran la liturgia católica. Las vocaciones religiosas-sacerdotales
son exiguas, los laicos pintan poco en general y las mujeres -religiosas y
monjas incluidas- son el vagón de cola.
Definitivamente debemos volver a
las fuentes de la vida cristiana: ¡a Jesucristo! Encontrarse con Cristo es y
será siempre el camino hacia una verdadera humanidad. La mayoría de los
seguidores de Cristo prostituyen el mensaje sobre el reino de Dios; así como no
tenemos políticos que nos representan, del mismo modo, en la fe, nadie nos representa
ahora... Maranathaaaa!!